Pues hoy me ha dado por hacer limpieza en el cajón de los bañadores y ¿qué me encuentro? pues de todo, bikinis con las gomas pasadas, bañadores sosos de años anteriores, tallas inadecuadas, etc, etc,.
Así que en vez de tirarlos, los he traído al cajón de las chapuzas y he decidido darles un toque nuevo a los sosos con broches del tejido de los que no voy a usar. Esta es la primera muestra: broche yo-yo con hama hecho con la tela de un bikini diminuto que jamás podré lucir y que venía de regalo con una revista del verano pasado. He aprovechado hasta el forro para hacer el yo-yo blanco, y los tirantes para adornar.
Creo que he cumplido con mi reciclaje de hoy. ¿No os parece?
Pues esto es un colgante reciclado inspirado en este tutorial que recuerda a una flor o a las alas de una mariposa, pues queda muy ligero y con movimiento.
Pulseras con la técnica anterior, pero esta vez con sólo dos colores, la mía en negro y plata y las otras dos para mis niños que también querían la suya en sus colores preferidos.
Aquí está el segundo colgante de la colección con el antes y el después para quien me pregunta qué es la base por no entender el idioma. Espero que así quede más visible.
Primer colgante de la colección "Flores en el mar", ¿dónde está el mar?, pues en la base del colgante que es un trozo de concha natural. Vendrán más que están en proceso de agujereado (lo peor).
Pulsera realizada con anillas de latas de refresco y crochet. Hay que reciclar el alumnio, pero además de colocarlo en el contenedor apropiado, podemos dar vida a nuevos objetos que además adornan, así que estoy contentísima con mi nueva pulsera.
